La IGP Pan Galego es una denominación de origen protegida que garantiza la calidad y autenticidad de los panes gallegos. Este distintivo es otorgado a aquellos productos que cumplen con los requisitos establecidos por la normativa europea y que son elaborados en la comunidad autónoma de Galicia, en el noroeste de España.
Información de la IGP Pan Galego
El Pan Galego es un producto tradicional de Galicia, con una larga historia y arraigo en la cultura gastronómica de la región. La IGP Pan Galego tiene como objetivo proteger y promover la producción de este pan, garantizando su calidad y autenticidad.
Para obtener la denominación de origen protegida, los panes gallegos deben cumplir con una serie de requisitos específicos en cuanto a ingredientes, proceso de elaboración y zona geográfica de producción. Estos requisitos aseguran que el pan gallego mantenga sus características tradicionales y únicas.
Uno de los aspectos más destacados de la IGP Pan Galego es la utilización de ingredientes autóctonos y de calidad. La harina utilizada debe ser de trigo gallego, cultivado en la región y con unas características organolépticas y nutricionales particulares. Además, se utiliza masa madre, que aporta sabor y aroma al pan, y se evita el uso de aditivos artificiales.
El proceso de elaboración del Pan Galego también es fundamental para obtener la denominación de origen protegida. Se sigue una técnica tradicional de amasado y fermentación lenta, que permite obtener un pan con una textura y sabor únicos. La cocción se realiza en hornos de piedra, que aportan un toque especial al pan gallego.
La zona geográfica de producción también es un factor determinante en la obtención del distintivo de la IGP Pan Galego. Los panes gallegos deben ser elaborados en la comunidad autónoma de Galicia, siguiendo las técnicas tradicionales y utilizando los ingredientes autóctonos mencionados anteriormente.
La IGP Pan Galego no solo garantiza la calidad y autenticidad del pan gallego, sino que también contribuye a la promoción y difusión de este producto tradicional. Gracias a este distintivo, los consumidores pueden identificar fácilmente el auténtico Pan Galego y disfrutar de su sabor y características únicas.